El brillo me estalla en los ojos

Dos meses han pasado desde que te contara que, durante el confinamiento, se intentaron aprovechar de mi historia unas terceras personas para crear contenido en su plataforma. 

Dos meses han pasado desde que ya salimos a la calle y casi, casi, nos parece que somos libres de nuevo.
Sólo dos meses

Estos meses han sido el tiempo suficiente para que mi vida haya cambiado de cabo a rabo, de arriba abajo, de abajo arriba.

Durante el confinamiento el dolor crónico neuropático, que me tratan desde 2016 en la Unidad del Dolor, fue en aumento y tuve que pedir auxilio.

Tramadol mediante descubrí que no hay nada que el ser humano no pueda soportar, que cuando piensas que tu cuerpo está a las puertas del abandono surge una energía cósmica, casi divina, que te ensalza hasta el infinito, y más allá, dándote las alas que necesitabas para salir del pozo. 

En mi caso esa fuerza sobrehumana, el pasado mes de junio cumplió 10 años, así a lo loco, sin fiesta ni celebración, 10 años.

Hay muchas clases de maternidad, eso está claro, pero la mía es preciosa. Divorciada, con más de 3 meses confinados, 24 horas a fuego, madre e hijo, hijo y madre, nos han enseñado muchas cosas y he podido constatar que la vida que logré dar es lo único por lo que merece todo esto.

Sí, yo merezco tener una vida "normal", pero qué hay más normal que poder ver a tu hijo crecer, cuidarlo, protegerlo, mimarlo ... ya sea desde una cama, un sofá o tirados en la playa. 

Lo normal está sobre valorado 

Me alegro de no ser "normal" aunque es una obviedad que vivir sin dolor es mucho más apasionante. No me quejo, podría ser todavía peor, estoy segura. Aprender que estamos aquí, con nuestras limitaciones, nuestras virtudes y defectos, para VIVIR es algo que me ha recordado el confinamiento. 

Hoy no te quiero contar nada especial, como puedes ver, hoy solo quiero compartir contigo que he descubierto que gracias al Dolor Crónico, a la Endometriosis, a la vida que he decidido vivir, soy feliz porque valoro y exprimo al máximo esos días buenos en los que el brillo me estalla en los ojos.

imagen pixabay



Comentarios